Un 96% de los aragoneses ha elegido el agua como la mejor bebida para combatir el calor en época estival. Esta es una de las cifras que ofrece la encuesta sobre "Los hábitos de hidratación en verano de los españoles", realizada por el Centro de Información Cerveza y Salud y Madison Market Research.
Un 44% de los aragoneses considera que la cantidad ideal de líquidos que hay que beber oscila entre 1,5 y 2 litros según esta encuesta. Sin embargo, la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) establece que las necesidades hídricas diarias para mujeres y hombres deberían ser de 2 y 2,5 litros respectivamente.
Los expertos aseguran que la fuente principal de hidratación debe ser el agua, si bien se puede completar la ingesta con otras bebidas como la cerveza, tanto tradicional como sin alcohol, ya que por su composición es una alternativa saludable en la aportación de líquidos para la hidratación del organismo; las infusiones o los zumos de frutas.
Asimismo, los expertos advierten que es necesario "vigilar especialmente la ingesta de líquidos" en los denominados grupos de riesgo, como ancianos, deportistas, mujeres embarazadas y lactantes, cuyo aporte hídrico diario debe ser mayor. Los deportistas por ejemplo, necesitan de forma adicional medio litro de líquidos media hora antes de realizar el ejercicio y 250 mililitros cada quince minutos durante la práctica deportiva.
Existen diferencias territoriales en la percepción de las necesidades hídricas, de hecho, según la encuesta, las comunidades del norte perciben que las cantidades ideales de líquido diario son inferiores a 1,5 litros. En cambio, las comunidades de la meseta y del Mediterráneo son las regiones que en mayor medida señalan que un consumo ideal debería ser superior a los 2 litros diarios. En el caso de Aragón, el 28% de sus habitantes conoce la necesidad hídrica diaria recomendada, frente al 24% a nivel nacional.
El calor influye de manera decisiva en los hábitos de hidratación de los españoles, pero según el experto Jesús Román Martínez, "se ha calculado que las necesidades de ingestión de agua del organismo giran en torno a los 30-35 mililitros por cada kilogramo de peso y día, lo que equivale a que nuestro organismo necesita una media de entre 2 y 2,5 l de agua cada día independientemente del lugar en el que se resida".
Por otro lado, los datos de la encuesta sobre cuando beben los aragoneses apuntan a que un 59% solo lo hace cuando tiene sed, frente a un 41% que lo hacen regularmente. En este caso, los resultados nacionales reflejan que las mujeres suelen beber más regularmente, frente a los hombres que suelen beber solo cuando tienen sed.
Otro dato que ofrece esta encuesta es que un 66% de los aragoneses reconoce que se preocupa más en verano que en invierno por mantenerse hidratado. A pesar de que el 74% de los aragoneses encuestados conoce los efectos adversos de una mala hidratación, cerca de un 15% reconoce haber sufrido un golpe de calor por la falta de una correcta hidratación.
Consejos saludables
Para evitar la deshidratación, la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación recomienda ingerir agua suficiente distribuida a lo largo del día y ofrece una serie de consejos para evitar la deshidratación en la época estival.
En primer lugar, afirma que se necesitan entre 30-35 mililitros de agua al día por cada kilogramo de peso. Indica que hay que beber agua con frecuencia, incluso cuando no hay sensación de sed. La ingestión de líquidos debe hacerse de forma gradual. Es recomendable una mayor cantidad por la mañana y a media tarde.
Los expertos recomiendan también aumentar el consumo diario de frutas, verduras y ensaladas; se puede completar la ingesta si se desea con otras bebidas, como zumos, infusiones, lácteos, cerveza sin alcohol, o cerveza tradicional con moderación; es preferible que la temperatura de la bebida esté entre los 11 y los 14 grados; hay que evitar la exposición al sol de forma continuada, especialmente entre las 12 y las 17 horas y por último, es necesario aumentar el aporte hídrico, antes y después de la práctica de ejercicio físico intenso.
